La violencia contra las mujeres y las niñas se produce en todo el mundo. Si bien es verdad que varios países la condenan enérgicamente, una gran parte de la población mundial sigue considerándola "normal". Sin embargo, esta violencia además de socavar la integridad de la mujer, reduce su acceso a los servicios y recursos esenciales.
Nos sentimos agradecidos de los muchos hombres y mujeres que siguen, valientemente, abogando por la eliminación de la violencia contra las mujeres y las niñas. Toda iniciativa de apoyo es digna de elogio y sus efectos se sentirán, a través de Cristo, en todos los ámbitos de la vida de la Iglesia.
El MMTC con motivo del 8 de marzo (Día Internacional de la Mujer) declara que estamos dispuestos a hacer frente a cualquier intento de excusar, encubrir o justificar la violencia. Declaramos que esta violencia es una ofensa contra Dios, la humanidad y la tierra.
Nuestra lucha es trabajar por la eliminación de la violencia contra las mujeres y las niñas en sus diferentes formas (sexual, religiosa, psicológica, ...) y promover su dignidad.
No debemos seguir tapándonos los oídos ante estos gritos de desesperación, ni sofocarlos guardando silencio o encerrándolos entre las cuatro paredes del hogar por orgullo, por miedo, por honor, por seguridad... porque la violencia contra las mujeres y las niñas es un pecado.
En Roma, en mayo de 1961, con ocasión del 70º aniversario de la encíclica «Rerum Novarum», los delegados de 42 movimientos decidieron crear un movimiento mundial de trabajadores cristianos. Esta creación formaba parte de un mundo en crisis después de la Segunda Guerra Mundial. También se producia después de muchos intercambios y debates entre los movimientos fundadores. Los obstáculos fueron muchos y tenían que ver con la historia de los países,de las iglesias, de los idiomas y de los propios movimientos. Pero el nacimiento del MMTC fue posible gracias a la voluntad, de cada movimiento, de abrirse a los demás, de aceptar las diferencias como una riqueza para abrirse a lo universal y de hacer dialogar a las culturas en un proyecto común que va más allá de los intereses nacionales. Esta creación de un movimiento internacional se inscribe en el contexto del Concilio Vaticano II, que da a la Iglesia Católica un gran aliento de renovación y esperanza.
En el año 2000, la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 18 de diciembre como Día Internacional del Migrante. La mayoría de las organizaciones de la sociedad civil y de trabajadores reconocen este como el Día Internacional de la Solidaridad con todos los trabajadores migrantes y sus familias, especialmente los más vulnerables.
En 2019, existen alrededor de 272 millones de migrantes internacionales. Millones de personas cruzan las fronteras en busca de nuevas oportunidades de trabajo y de una vida decente para ellas y sus familias.
18 de diciembre
En este día 18 de diciembre, afirmamos que todo migrante es un ser humano con derechos, para sí mismo y para su familia. Los trabajadores migrantes no son mercancía. Según la Asociación de Naciones del Asia Sudoriental (ANAS), hay unos 20,2 millones de migrantes de países de la ANAS. Las mujeres representan casi la mitad de los migrantes intra- ANAS (48,7%). La contribución de los trabajadores migrantes al crecimiento económico tanto en los países de origen como en los de acogida es importante.
Según la OIT(1) en 2018 la mayoría de los 3300 millones de personas empleadas en el mundo sufrieron déficits de bienestar material, de seguridad económica y de igualdad de oportunidades, y carecieron de margen suficiente de desarrollo humano. En 2016, el 61 por ciento de la población activa mundial estaba en el empleo informal. En 2018 más de una cuarta parte de los trabajadores de países de ingreso bajo y mediano bajo vivían en situación de pobreza extrema o de pobreza moderada. Igualmente había 172 millones de personas desempleadas en el mundo (tasa desempleo 5%). Las previsiones para 2020 son de 174 millones de personas desempleadas.
Para la Doctrina Social de la Iglesia (DSI), el trabajo es un derecho fundamental de toda persona, es un bien y todos tienen derecho a un trabajo digno. La DSI defiende la primacía del trabajo sobre el capital como un principio fundamental. Los derechos de los trabajadores y trabajadoras, y de sus familias, son el criterio desde el que habría que organizar el trabajo humano, las condiciones en que se realiza y, en realidad, toda la economía.
- Mensaje del papa Francisco a la reunión centenaria de la OIT
- Declaración del MMTC - Día Internacional de l@s trabajador@s - 1° de mayo de 2019
- 8 de marzo de 2019: "Antes de ser mujer, una mujer es un ser humano"
- Mensaje de solidaridad: 18 de diciembre, Jornada Internacional de los trabajadores migrantes
- 7 de octubre 2018: Declaración del MMTC en el Día Mundial por el trabajo decente
- Oración del MMTC por el trabajo decente - 7 de octubre de 2018
- El MMTC participa en la Conferencia Internacional "Laudato Si" sobre el cuidado de la casa común - Vaticano, 5-6 de julio de 2018
- El Vaticano convoca un encuentro para favorecer un movimiento masivo que cuide el planeta e incida en próximos eventos mundiales
- Primero de Mayo de 2018 : Mensaje del MMTC
- 8 de março de 2018: Declaração do Movimento Mundial de Trabalhadores Cristãos (MMTC)
- 8 de marzo 2018: Declaración del Movimiento Mundial de Trabajadores Cristianos
- MENSAGEM DO PAPA FRANCISCO POR OCASIÃO DA CONFERÊNCIA INTERNACIONAL SOBRE O TRABALHO COM O TEMA: «DA POPULORUM PROGRESSIO À LAUDATO SI'»
- Declaración final del Encuentro Internacional de Organizaciones Sindicales, Roma, noviembre de 2017
- Mensaje del papa Francisco al Encuentro Internacional de Organizaciones Sindicales
- O papa Francisco convoca os sindicatos para abordar conjuntamente os problemas e desafios do trabalho
- El papa Francisco convoca a los sindicatos para abordar conjuntamente los desafíos del trabajo
- Oración para la Jornada del 7 de octubre de 2017
- 07 DE OCTUBRE - Lucha de los trabajadores del mundo por una Renta Básica Universal
- Elegida la nueva dirección del MMTC #3TVD
- Declaración final del Seminario Internacional y de la Asamblea General del MMTC - Ávila 2017